Algunos de los indicadores para saber si es necesario realizar una endodoncia son, además de tener un dolor agudo, el oscurecimiento del diente, si al agacharnos sentimos un dolor postural, si sentimos dolor con el calor y alivio con lo frío además de si presentamos unas manchas blancas en las encías producidas por fístulas.
El objetivo del tratamiento es salvar la pieza dental y se realiza en piezas dentales cariadas, fracturadas y lesionadas. Consiste en la retirada de la pulpa enferma, la desinfección de la cámara pulpar y los conductos de la raíz para posteriormente proceder a su sellado. Finalmente se recubre con una corona para proteger al diente de futuras fracturas.
La endodoncia es la rama de la odontología que se encarga de las enfermedades asociadas al nervio pulpar.
Usualmente cuando presentamos un dolor de muela, este puede deberse a la inflamación del nervio pulpar o como producto de un proceso infeccioso, que puede producir un absceso. También se puede utilizar este procedimiento cuando ocurre un traumatismo severo que genere un oscurecimiento del diente producido por una necrosis.